Pickles diferentes, que reconfortaban a nuestros abuelos de los sinsabores de la vida en Europa oriental
Ingredientes (para 4 litros aproximadamente)
3 ½ kilos (7 libras) de remolachas pequeñas
4 tazas de vinagre
1 ½ cuadradita de sal
2 tazas de azúcar
2 tazas de agua
2 astillas de canela
12 clavos de especias
4 cebollas pequeñas
Preparación del encurtido de remolachas
Recorte las remolachas en la parte donde están las hojas, dejando ½ centímetro para prevenir que se decoloren.
Lávelas muy bien y escójalas por tamaño.
Métalas (por grupos de igual tamaño en una olla con bastante agua hirviendo, y cocínelas durante 30 minutos o hasta que estén tiernas, escúrralas y bote el liquido, déjelas enfriar y pélelas, cortándolas en rebanadas finas, pele y rebane las cebollas.
Combine el vinagre, con la sal y el azúcar y agua fresca.
Coloque las especias en una bolsito o un paquetito de gaza o liencillo, añádalo al agua con vinagre y llevo toso a ebullición sobre fuego moderado.
Añada las remolachas y las cebollas y cocine a fuego lento durante 5 minutos.
Saque la bolsa o gasa con las especias y llene con las remolachas y las cebollas los frascos esterilizados dejando 1 centímetro del borde.
Cubra con la solución de vinagre y agua, cierre herméticamente y meta los frescos en una olla grande con una trapo de cocina al fondo, cubra con agua y lleve a ebullición, cociendo durante 40 minutos, deje enfriar dentro del agua, saque los frascos y colóquelos boca abajo sobre la mesa, déjelos reposar 1 hora y luego almacénelos en un sitio fresco y a salvo de la luz.