El 18 de enero de 1938, el gobierno de Ecuador expulsa a todos los judíos extranjeros que no se dedicaran a la agricultura
El Gobierno Militar Provisional del Coronel Alberto Enríquez ordena en esta fecha de 1938 la expulsión de todos los judíos extranjeros del Ecuador, excepto los que se dedican a la agricultura.
Según el decreto, cientos de judíos a los que se les permitió emigrar el Ecuador para escapar de la persecución en Europa Central se había dedicado a los negocios en lugar de la agricultura, como esperaba el Gobierno ecuatoriano.