El 5 de abril de 1533, el Papa Clemente VII promulga la “Bula de perdão” que intenta proteger a los cristianos nuevos portugueses de la Inquisición, pero muere antes de lograr su objetivo
En un esfuerzo por poner un freno a la Inquisición, el Papa Clemente VII emitió en esta fecha la “Bula do Perdão Geral”, destinada a ayudar a los judeoconversos que vivían en Portugal.
Se trataba esencialmente de un perdón por todas las ofensas pasadas que suspendía las actividades del tribunal inquisitorial,
Desafortunadamente, el Papa Clemente VII murió poco tiempo después, y el Papa Paulo III estableció definitivamente la Inquisición en Portugal en 1536.