La empresa israelí ¡Yo! Egg creó los que llama los primeros huevos escalfados y fritos a base de plantas del mundo…
¡Yo! Egg se fundó en 2019, con el objetivo de desarrollar huevos animal-free completos, con el equivalente de claras de huevo y yemas líquidas pero sin colesterol.
Para ello utilizan una mezcla de proteínas de origen vegetal, agua, aceite de girasol, soya, harina, etc, todos 100 % veganos, que dan como resultado huevos “libres de huevos”.
La startup opera en un mercado global de huevos veganos que se espera que llegue a los $ 2,6 mil millones de dólares en 2026, contra los USD $ 650 millones actuales.
La empresa ya ofrece otros productos similares al huevo a base de plantas -tales como sustitutos del huevo o mezclas para hacer huevos revueltos y tortillas-, pero apunta a ofrecer “huevos enteros” a quienes prefieren el sabor y la textura de los huevos cocidos.
La startup también tiene en desarrollo una línea de “huevos” duros.
La misión declarada de la compañía es convertirse en “el productor de huevos sin pollos más grande y sostenible del mundo”, mientras ayuda a combatir “el colesterol, la la explotación animal y el cambio climático”.
Los productos de Yo! Egg están disponibles en Israel en Benedict, una cadena especializada en desayunos, y a finales de 2022 también lo estarán en restaurantes del área metropolitana de Los Ángeles.
Proteínas alternativas, un mercado en crecimiento
Los huevos, los productos lácteos y la carne de origen vegetal -también conocidos con el nombre genérico de “proteínas alternativas”- son opciones cada vez más populares, gracias a la proporción cada vez mayor de consumidores que se consideran veganos, vegetarianos o “flexitarianos”.
Se espera que el mercado mundial de alimentos veganos pase de USD $15,77 mil millones en 2021 a $22,27 mil millones en 2025.
Por su parte, el sector de las proteínas alternativas creció en Israel alrededor de un 450% en 2021 con respecto al año anterior, y las startups israelíes del sector recibieron unos 623 millones de dólares en inversiones.
Israel alberga actualmente a más de 400 empresas de tecnología alimentaria, un amplio campo que incluye nutrición, envasado, seguridad alimentaria, sistemas de procesamiento, ingredientes novedosos y proteínas alternativas.
Este último comprende sustitutos de origen vegetal para la carne, los lácteos y el huevo; lácteos cultivados, carnes y mariscos; proteínas de insectos; y productos y procesos de fermentación.