La marihuana medicinal brinda un alivio efectivo del dolor aún cuando se toma en pequeñas cantidades, lo que a su vez elimina los efectos secundarios…
Muchos pacientes que toman marihuana medicinal tienen problemas con el hecho de que el principal componente analgésico del cannabis, el tetrahidrocannabinol (THC), también tiene efectos psicoactivos, lo que significa que el alivio del dolor a menudo implica un subidón que puede interferir con la vida cotidiana.
Algunas personas toman CBD como analgésico y calmante para el estrés -un componente de la marihuana -que se considera que carece de cualidades que alteran la mente-, pero en general se recomienda a los pacientes más graves que tomen un compuesto de THC o fumen cannabis, a pesar de los efectos secundarios. .
Pero la empresa israelí Syqe Medical dice haber encontrado que dosis muy bajas de THC pueden brindar un alivio efectivo del dolor, al tiempo que evitan sus efectos secundarios.
Se trata de poder determinar cuál es la dosis más pequeña del medicamento que permita lograr el mayor alivio de los síntomas, con los menores efectos secundarios y la mejor calidad de vida.
En ese sentido, la investigación de la empresa israelí sugiere que el nivel de alivio del dolor que se alcanza con una microdosis es similar a la obtenida con las dosis habituales -similar al alivio del dolor al fumar marihuana-, pero casi sin efectos secundarios, lo que la convierte en una mejor forma de dosificación.
Una microdosis efectiva de THC causa un subidón de solo un minuto y, a menudo, ninguno.
Algunos pacientes, con el apoyo de sus médicos, ya toman marihuana mediante las llamadas microdosis, pero el método ha estado sujeto a una investigación limitada, y falta determinar cuáles son las dosis precisas que se necesitan.
Las tecnologías como los aerosoles y los inhaladores se están poniendo de moda, pero los pacientes a menudo calculan la cantidad del medicamento que deben tomar mediante prueba y error.
Muchos médicos todavía recetan cannabis por gramo para que los pacientes fumen, sin una guía clara sobre las dosis óptimas.
Y si tienen una idea de cuánto THC quieren que reciban los pacientes, no tienen forma de saber la cantidad exacta que se absorbe el cuerpo por cada gramo de cannabis fumado, ya que eso varía de persona a persona.
La empresa israelí, Syqe, realizó la investigación porque fabrica un inhalador que se puede programar para dosificar THC en microgramos, y afirma que los resultados apuntan a la utilidad de esta tecnología.
En la investigación, publicada en el European Journal of Pain, se descubrió que los pacientes respondían mejor a una dosis de solo 500 microgramos.
Pero algunos investigadores afirman que, si bien la investigación es una contribución útil, la naturaleza del alivio del dolor que produce el THC siempre requerirá de una dosificación más individualizada que muchos medicamentos estándar.
Esto significa que, si bien la microdosificación podría ayudar a algunos pacientes, es posible que muchas personas requieran dosis más altas.