El 11 de Abril de 1952, el Dr. Irving Cooper descubre el tratamiento quirúrgico contra la enfermedad de Parkinson
El Dr. Irving Cooper encuentra accidentalmente un tratamiento quirúrgico para la enfermedad de Parkinson en esta fecha en 1952, cuando inadvertidamente lastimó la arteria coroidea anterior (AChA) de un paciente con Parkinson
durante una cirugía cerebral y se vio obligado a cerrar la arteria.
Cuando el el paciente despertó de la anestesia, su temblor y rigidez habían desaparecido sin que su capacidad motora y sensorial se vieran afectadas.Comenzó entonces a ligar la AChA a propósito para reducir los temblores de la enfermedad.
Cooper (1922-85) también desarrolló otras técnicas quirúrgicas para tratar varios trastornos neurológicos causados por los derrames cerebrales. En 1973, desarrolló un implante cerebral o “marcapasos” que ayudaba a controlar las convulsiones y a reducir los espasmos de las personas con parálisis cerebral a través de la emisión de pequeñas cargas eléctricas.
“La medicina moderna ha perdido de vista su propósito“, dijo Cooper ese año, “el tratamiento de los individuos enfermos que han venido a por ayuda“.
“Con ese objetivo“, escribió Ronald Sullivan en el New York Times, “se dedicó al tratamiento de personas con las condiciones más dolorosas y paralizantes. En muchos casos, ayudó a mejorar a pacientes que habían sido abandonados a su suerte en calidad de “incurables“.
“[Cooper es uno] de los grandes neurocirujanos del mundo”
– C. P. Snow