Receta de la masa básica del más delicioso de los blinis, el primo hermano de los blintses
Un blintz, un blintze o un blin (plural: blintzes, ruso: блин, блины (pl.) blini; ucraniano: млинці, mlyntsi; blini; Yiddish: el blintse del בלינצע) es una crepe fina (similar a un crêpe).
El blintz inglés de la palabra viene del בלינצע de Yiddish (“blintse”), que alternadamente viene de blin. “Blin” viene del viejo mlin de Slavic, que significa “moler” (comparar la palabra ucraniana para el млинець, los mlynets del blin”).
Blins tenía una significación algo ritual para los antiguos eslavos puesto que eran un símbolo del sol, debido a su forma redonda.
Fueron preparados tradicionalmente en el final del invierno para honrar el renacimiento del sol nuevo (semana de la crepe, o de Maslenitsa). Esta tradición fue adoptada por la iglesia ortodoxa y se continúa a hoy.
Todas las clases de harina se pueden utilizar para hacer blini: desde trigo y alforfón hasta harina de avena y de mijo, aunque el trigo es actualmente en gran medida el más popular.
Blintz fue popularizado en los Estados Unidos por los inmigrantes judíos, pues el blintz es un plato popular en la cocina judía.
Aunque no están asociados a algún rito religioso específico en el judaísmo, los blintzes que se rellenan con queso y después se fríen en aceite se sirven en días de fiesta tales como Januca (el aceite es parte de la historia del milagro de Januca) y Shavuot (en que se sirven tradicionalmente platos con leche ).
El blini de alforfón es parte de la cocina rusa tradicional, casi olvidada durante los tiempos de la Unión Soviética.
Siguen siendo populares en Ucrania en donde se conocen como hrechanyky (ucraniano: гречаники) y la región de Lituania -Dzūkija- donde se produce el alforfón.
Ingredientes de los blinis o panqueques rusos
Para 20 a 24 panqueques rusos, se pueden guardar en la heladera o freezer
30 g de levadura de cerveza fresca o
15 g de levadura de cerveza seca
115 ml de agua caliente
120 g de harina
120 g de harina de trigo “sarraceno”
½ cucharadita de sal
30 g de manteca
300 ml de leche
2 huevos (yema y clara separadas)
30 g de manteca, para freír
Preparación de los blinis
Disuelva la levadura en agua caliente durante 15 a 20 minutos. En un bol grande pase por el tamiz la harina y un cuarto de la harina de trigo “sarraceno” juntas.
Coloque la harina, en forma de corona, añada la levadura y revuelva con un tenedor o una cuchara de madera, añadiendo un poco de agua caliente si es necesario, hasta obtener una mezcla consistente y sin grumos.
Cubra el bol con un servilleta y colóquelo dentro de otro bol con agua caliente, o deje que la mezcla levante en un lugar templado como la rejilla superior del horno, a fuego bajo, durante una hora.
Cuando la mezcla haya levantado, bata las yemas. Caliente la leche con la manteca hasta que la manteca se derrita. Enfríe hasta entibiar.
Entonces, remueva en la mezcla el resto de la harina de trigo “sarraceno”, la sal y las yemas batidas, y después añada gradualmente la leche y la manteca. Bata bien y deje que la mezcla levante durante otra hora.
Pasada la hora, bata las claras a nieve y agréguelas. Deje descansar 15 minutos.
Caliente una panquequera o sartén (paila) para blinis a fuego mediano, añada un poco de manteca y vierta la mezcla necesaria hasta cubrir el fondo de la panquequera.
Puede usarse una panquequera grande porque la mezcla no se extiende fácilmente.
Dé vuelta el blini cuando los bordes comiencen a dorarse y cocínelo del otro lado.
Sírvalos tan pronto estén listos, o consérvelos calientes en horno a fuego bajo. Son deliciosos con crema agria y caviar o con salmón ahumado y salsa tártara.
Nota: estos panqueques se enfrían bien, sin perder consistencia, por lo que pueden ser guardados en la heladera (nevera / refrigerador) o freezer, pero deben ser recalentados en horno caliente antes de servirlos.