Lo comprobamos: por más que veamos programas relacionados, Netflix nunca nos recomienda ninguna de estas películas. ¡No te las pierdas!
Maktub
Después de sobrevivir a un ataque terrorista con explosivos en un restaurante de Jerusalén, dos delincuentes de poca monta deciden cambiar de vida y empiezan a hacer realidad los deseos dejados en el Muro de los Lamentos por desconocidos.
¡Solo en Israel podría una comedia comenzar con un ataque terrorista!
A no confundir con la película argentino-española del mismo nombre (con Diego Peretti).
Menashe
Tras la muerte de su esposa, un hombre ultraortodoxo enfrenta las presiones de la comunidad, que quieren obligarlo a elegir entre dar a su hijo en adopción o buscar una nueva pareja.
Con Menashe Lustig, él mismo ex miembro de la comunidad ultraortodoxa.
El banquero de la Resistencia
Una película holandesa (¿acaso Netflix te recomendó alguna vez una película holandesa?) basada en hechos reales (Bankier van het Verzet es el título original).
Arriesgando su familia y su futuro, los hermanos Walraven y Gijs van Hallun intentan frenar la maquinaria de guerra nazi y crean un banco para financiar la resistencia.
Suicidio (Hitabdut)
En esta película israelí, una joven abogada tiene que cometer el crimen perfecto para salvar a su familia de un usurero psicópata.
No apta para cardíacos.
Riphagen, el carnicero holandés
Esta serie holandesa, también basada en hechos reales, describe en tres episodios la historia de colaboración con los nazis de Andries Riphagen, un criminal común que chantajeaba a los judíos en la Segunda Guerra Mundial y fue responsable de cientos de muertes. Curtiz
Esta película húngara nos cuenta la historia del director de cine judeo-húngaro Michael Curtiz, que debe hacer malabares para lidiar con las interferencias políticas y una relación disfuncional con su hija en medio de la problemática producción de “Casablanca” en 1942
The Devil’s mistress
Esta película checa dirigida por Filip Renc cuenta la historia de Lída Baarová, una actriz checa que conquistó al público en Alemania y rechazó todas las ofertas de Hollywood para ser la amante del Ministro de Propaganda nazi, Joseph Goebbels.
De ahí su título: “La amante del diablo”
Los Meyerowitz: la familia no se elige
Una comedia bastante amarga sobre una familia judía disfuncional. Compuesta por varios episodios cortos, la película cuenta la historia de los hermanos Meyerowitz y su relación con su padre artista.
Aunque la película tiene pocas referencias judías explícitas, la película se siente muy “judía”, quizás en parte debido al director, Noah Baumbach. Muchos de los personajes también son interpretados por actores judíos conocidos, incluidos Ben Stiller, Adam Sandler y Dustin Hoffman.
Playing For Time
Esta película cuenta la historia de Fania Fénelon, una reconocida música judía francesa deportada a Auschwitz, en donde los nazis la obligaron a tocar en la llamada “Orquesta de Mujeres de Auschwitz-Birkenau”.
Se basa en la autobiografía de Fenelon, “Playing for Time”, y el guión es del mismísimo Arthur Miller.
Los gustos y los colores
Esta película francesa de Myriam Aziza es una comedia que habla de religión, relaciones y sexualidad, centrada en un trío de jóvenes parisinos.
Simone es una mujer judía y lesbiana que ha estado en una relación durante tres años y no sabe cómo salir del closet frente a su conservadora.
Justo cuando está a punto de hacerlo, de repente se enamora de un joven musulmán y negro.
Es un retrato liviano pero respetuoso de una típica familia judía de la Francia actual, y al mismo tiempo una exploración de la identidad de una mujer.
La familia, el judaísmo y la identidad son temas que Aziza ya ha explorado en sus películas anteriores.
