¿Qué mejor ubicación para un hotel inspirado en la milenaria doctrina mística judía que Safed, en el norte de Israel, el hogar espiritual de los maestros de Kabbalah más famosos de la historia?
Genine Barel y su esposo Rony querían capturar las cualidades intrínsecas de la antigua sabiduría de la Kabbalah en su capital espiritual, Safed, y no encontraron mejor manera que abrir hotel boutique inspirado en sus enseñanzas, el The Way Inn, al que Barel llama “el primer hotel de Kabbalah del mundo”.
Los vínculos de Safed con la Cabalá se remontan al sabio del siglo II rabi Shimon Bar Yochai -comúnmente conocido como el Rashbi-, un duro crítico del imperio romano que escapó de una muerte segura escondiéndose en una cueva cerca de la ciudad norteña de Pekiin, en donde enseñó durante trece años.
La tradición dice que es el autor del Zohar, la obra literaria fundamental de la Cabalá. Durante el siguiente milenio, el estudio de la Cabalá se limitó a estudiosos seleccionados que acudían a Safed en parte debido a su proximidad con la tumba de Rashbi en el Monte Meron.
Uno de esos eruditos, el rabino Isaac Luria, desarrolló y popularizó la Cabalá en tal medida que la mayoría de las personas que hoy la estudian, de hecho, estudian la llamada “Cabalá Luriánica”.
Barel describe su propia idea de la Cabalá como una versión contemporánea de la renovación y la espiritualidad judías, y su hotel rinde homenaje a las características tradicionales del movimiento de varias maneras (pero no tiene afiliación con ningún Centro de Kabbalah en particular).
El hotel está ubicado en el Barrio de los Artistas, en el corazón de la Ciudad Vieja de Safed, en una casa histórica de 250 años de antigüedad y con una gran vista de las montañas de Galilea.
Sus siete suites (cuatro para familias y tres para parejas) llevan el nombre y están inspiradas en siete de las sefirot que se encuentran en el Árbol de la Vida, un símbolo místico central de la Cabalá.
Esas sefirot -Gevurah, Hesed, Tiferet, Netzach, Hod, Yesod y Maljut-, se manifiestan en el color de cada habitación, en función de la energía de cada sefira.
Cada habitación tiene en la pared pinturas de las principales figuras de Cabalá, creadas por artistas locales de Safed, y está decorada con muebles de época para lograr un efecto minimalista y modesto que permita al huésped concentrarse en la energía de Safed y “conducir esa energía hacia sí mismo”. Por esa razón, dicen los propietarios, no hay televisores en el hotel.
El Way Inn ofrece una serie de actividades relacionadas con la Cabalá, que incluyen visitas guiadas, talleres de meditación, conferencias con reconocidos rabinos y maestros, y viajes al Monte Meron para visitar la tumba de Rashbi.
El hotel también puede organizar programas de estudios de Cabalá o desarrollo espiritual. Los talleres se llevan a cabo en una espacio especial llamado “Sala de la matriz”, un salón relajado ubicado entre dos estructuras con cúpulas típicas de Safed, con pisos de piedra, cojines y telas.
