El cementerio judío de Basavilbaso, en Argentina, tiene varios motivos para ser considerado único en el mundo. Aquí te contamos sus historias más particulares…
Basavilbaso, en la provincia de Entre Ríos, fue el centro de la colonización judía en Argentina y de un fenómeno único en la historia judía: los gauchos judíos. Los cementerios suelen ser un paradójico reflejo de la vida de una comunidad, y el de Basavilbaso no es una excepción: es tan único como los judíos que lo fundaron. Estas son algunas de las historias que encierra:La tumba colectiva de la familia Arcusín, asesinados por sus peones. Luego de ser degollada la familia entera (niños incluidos), sus asesinos prendieron fuego a la casa de los Arcusín. Ante la imposibilidad de reconocer los cuepos, la familia entera fue enterrada en una tumba colectiva. No apto para impresionables: ante la falta de fotografías en vida, a esta persona le sacaron una foto en su lecho de muerte para colocarla en su lápida.Abraham Zentner, fallecido a la increíble edad de 112 años. Cuando nació, ¡la Argentina aún era colonia española!Los tambores invertidos son tumbas de niños que fallecieron ni bien llegaron los inmigrantes judíos a las colonias (con ellos se inició el cementerio, antes incluso de poder levantar una sola casa).
Su pobreza era tan grande, que es lo que pudieron usar como tumbas.Colocada en un lugar de honor, esta es la tumba del doctor Bernardo Uchitel, un médico que dio su vida para salvar a un paciente.
Estando enfermo de gripe (en una época en que no existían los antibióticos), se levantó de la cama para atender a un paciente que lo necesitaba, pero la gripe se complicó con una neumonía que terminó con su vida.
Unas de las principales calles de Basavilbaso lleva su nombre.Tumbas de niños fallecidos durante una epidemia de fiebre tifoidea.
Las que solo tienen un número son los niños fallecidos antes de ser circuncidados (en los registros sí figuran sus nombres).Las tumbas contra el muro corresponden a hombres que se suicidaron. La mayoría de ellos, por no poder cumplir su palabra. ¡Sin duda era una época muy diferente a la actual!
Un caso único en el mundo
La tumba del sargento ayudante Jacobo Roskin, un caso único en el mundo: una tumba judía con un busto sobre ella.
Roskin fue ya en vida un caso casi único: militar en un país en que tal carrera estaba vedada a los judíos.
Luego de su muerte el ejército envió el busto. según algunos para honrar la memoria de Roskin, según otros con el expreso propósito de buscar una excusa para atacar los judíos, a sabiendas de que su religión no permite tal cosa en las tumbas (Roskin, además, era Cohen). Cuenta la historia que la familia se opuso terminamente a colocar el busto en la tumba, pero que la comunidad judía los convenció de que era mejor evitar problemas con el gobierno.
Amor eterno
Como en todos los cementerios judíos, las tumbas miran hacia Jerusalem, es decir hacia el este en el caso de la Argentina.
Pero esta tumba está ubicada en forma transversal a las demás, mirando directamente hacia la sección de las mujeres (en aquella época, era costumbre que hombres y mujeres estuvieran enterrados en secciones separadas).
La esposa de este hombre falleció muy joven, y fue enterrada justo en frente (es la tumba con flores).
Transido de dolor, su marido compró tres lotes contiguos y dejó instrucciones para ser enterrado de esta forma, para poder ver a su esposa por toda la eternidad. ¿Como visitar las colonias judías de Entre Ríos? Visitar las colonias judías de Argentina debería estar en el top ten del turismo cultural judío de todo el mundo, pero lamentablemente está poco desarrollado y no resulta fácil encontrar con quien recorrerlas. Para informarte, la mejor es comunicarte con los responsables del “Circuito Judío del Centro de Entre Ríos”, a través de su página de Facebook